En 1953, Alfred C. Kinsey causaba nuevamente revuelo con otro estudio. Ese año, aparecía el ‘Comportamiento sexual de la mujer’, investigación que le tomaría la posta al ‘Comportamiento sexual del hombre’ (1948). Con ambos trabajos, Kinsey solo (de) mostraba que la masturbación, la infidelidad, la homosexualidad y la bisexualidad –prácticas consideradas inmorales por entonces (bueno, hasta ahora la mojigatería arranca varias santiguadas)- se practicaban en cifras considerables.
Colombia también contó con una especie de Kinsey: se trata de Hernán Hoyos, ‘el pornógrafo de Cali’. Un hombre que no se forjó en Harvard como el afamado científico, pero que “se sintió escritor toda la vida” y que “sabía que para serlo tenía que tener experiencias”, tal como lo revela en la entrevista que la escritora ecuatoriana Gabriela Alemán le realizara (‘El pornógrafo de Cali: entrevista a Hernán Hoyos’, La Barra Espaciadora).
En 1953, Hoyos publicó ‘El retorno de la Monja Alférez’, dando paso a que de su pluma aparecieran más de 40 libros, de los cuales, en su mayoría, se encasillan en lo que él mismo califica como “sexo ficción”. Así aparecerían títulos como ‘Sin calzones llegó la desconocida’, ‘El club del beso negro’, ‘008 contra Sancocho’, entre otros.
Esos libros no poblaban las librerías y las bibliotecas como otras obras latinoamericanas que gozaban del boom, no. Los puestos de revistas eran los epicentros de ventas de Hoyos, quien sobrepasa el medio millón de ventas.
Curiosamente, como demostrando que la historia muy pocas veces no es implacable, aparece una edición ecuatoriana de ‘008 contra Sancocho’, la cual, seguramente, estará en librerías, pero sin dejar la característica de Hoyos en sus páginas: desacralizar a la propia literatura.
Sancochada
La noche del último viernes fue una velada no apta para quienes rechazan la yuca. Quienes llegaron al Ochoymedio pudieron conocer un poco más a Hernán Hoyos, acercarse a uno de sus personajes (Jaime Abondano, el agente 008, un tipo más acorde a un personaje de una película de Woody Allen, que a un detective a lo Ian Fleming), saborear un sancocho y tomar una cerveza.
Esto, gracias a la iniciativa editorial El Fakir, un proyecto ecuatoriano “interesado en poner en circulación textos desestimados”, que apuestan por “revisitar textos que en su momento no fueron debidamente aquilatados porque su propuesta excedía el paradigma vigente en su época o porque no existían las condiciones necesarias para entender o apreciar sus contenidos”. Atrás de esta propuesta están Gabriela y Álvaro Alemán, César Salazar, Edwin Fuentes, Carlos Villarreal y Ernesto Proaño.
Claro que el sancocho no se limitó a un ocasional festín ni tampoco fue una mera presentación de libro y arranque de una editorial: ‘008 contra Sancocho’ fue la oportunidad para debatir.
Sí, después de mirar el corto documental ‘Hernán Hoyos, un escritor de mala reputación’, de Carlos F. Rodríguez, y de saborear la cómica lectura dramática del inicio de ‘008 contra Sancocho’, a cargo de César Salazar, se realizó el conversatorio ‘Pornografía/Censura/Libertad de expresión’, donde participaron Fernando Escobar Páez, Verónica Potes y Álvaro Alemán.
Escobar Páez dejó en claro que esta novela de Hoyos, en particular, no es pornográfica. La catalogó como una obra pulp, donde un agente es menos idealizado -a diferencia del 007 de Fleming-, y se presenta a un hombre común y corriente con las necesidades de cualquiera.
Confrontación, no agresión
Por su parte, Álvaro Alemán, además de indicar que ‘008 contra sancocho’ sí es pornográfica, reflexionó sobre la necesidad de entender a la confrontación como una herramienta de debate pro democracia, diferenciándose por completo de la agresión.
Mientras que Potes, desde sus intervenciones, señaló que hay una censura que viene desde el poder y otra que la produce uno mismo. Ambas dañinas, a su medida, enfatizando en que el déficit de contenidos no puede ser censurable, salvo el caso de que un estudio demuestre lo perjudicial del mismo.
Tomando el criterio general de los tres, se puede decir que ‘008’ es una obra de lenguaje cotidiano, que permite que el lector (‘común y corriente’) se identifique con sus páginas, que permite confrontar y acariciar aquellos temas censurables. En definitiva, El Fakir quiere caminar con fuego y recostarse sobre una cama de clavos, ojalá que el lector se queme sin miedo y se acurruque sobre esta punzante cama. (DVD)
Festival
° La escritora Gabriela Alemán, miembro de Fakir Ediciones, propone el mini festival ‘Contra la corrección política: el mundo de 008 contra Sancocho’, dentro del espacio Carta Blanca, del Ochoymedio. Así, durante este mes, se presentarán: ‘El Decamerón’, de Pier Paolo Pasolini; ‘Torrente, el brazo tonto de la ley’, de Santiago Segura; ‘Entre tinieblas’ y ‘Pepi, Lucy y Bom y otras chicas del montón’, de Pedro Almodóvar; ‘Bananas’, de Woody Allen, y ‘La espía que me amó’ de la saga Bond, dirigida por Lewis Gilbert.

Tome nota
Revisar horarios del mini festival de cine propuesto en torno a ‘008 contra Sancocho’ en: www.ochoymedio.net

Acá link al artículo original: El Fakir celebra inicio con una sancochada